El proceso para adaptar, y reducir, la condena impuesta por un tribunal extranjero a las leyes españolas se puede llevar a cabo mediante el proceso de conversión de la condena.
Solo los ciudadanos españoles podrán obtener la conversión o adaptación de la pena que se le haya impuesto por un tribunal extranjero conforme a la legislación española (estado de cumplimiento).
El hecho de haber sido condenado en el extranjero y trasladado a España no significa que tenga que cumplir la pena íntegra. En estas situaciones todos los españoles, siempre que reúnan los requisitos para ello, deberían solicitar la conversión (adaptación) de la pena a la legislación Española.
En definitiva, el proceso de conversión (adaptación) de la pena a las leyes españolas sólo puede aplicarse a los españoles.
